Carta de Norma Pérez Martín

Buenos Aires. Julio 2006.

Querida María Cristina:

Espero que estés recuperándote, logrando una perfecta salud.
No te escribí antes, pues deseaba hacerlo una vez concluida la lectura de tus libros que generosamente me regalaste.
Amanecer en África: es una novela sumamente deliciosa, que atrapa al lector.
Muy bien construida, amena, y sobre todo, rica e ilustrativa. A través de sus páginas todo receptor atento recogida datos, costumbres, paisajes, culturas tan lejanas y tan antiguas.
Te felicito, María Cristina, por las estupendas descripciones y aguda observación que has hecho acerca de cada personaje. Realidad y ficción -sin duda- entretejen la trama de este libro que, seguramente contiene muchos elementos autobiográficos, verdad?
El país de los Pechanes ratificó ampliamente las exactas palabras de la contratapa de este libro.
Tus ilustraciones dicen de tu sabio manejo, tanto de la literatura como de las artes plásticas. Hay en esta obra mucha imaginación, mensajes, pluralidad de personajes. Estos se suceden a través de una prosa ágil y colorida. Las descripciones, así como los elementos simbólicos, van entramando capítulos donde las imágenes crecen y el universo fantástico se da cita con la dura realidad. Por cierto, un engranaje muy bien logrado que revela tu calidad narrativa.
3 x 6 + 3: ¨Cuentos¨ curioso título que me sorprendió desde antes de leer esta obra. ¨Semillitas¨ es un cuento donde la fantasía cobra cuerpo a partir de tu impecable escritura.
Las obras de teatro: están muy bien trazadas y muestran muy buenos desenlaces. Cada una desde temas distintos, asumen mensajes con fuerte dosis socioculturales. Vaya machismo el de Urquiza, que por cierto refleja una realidad de aquellos tiempos, aunque no diluida totalmente en nuestros días! Verdad?
Todos estos cuentos me parecen excelentes;  el erotismo en ¨Amor por chocolate¨, la tragedia en ¨Martín¨, así como el desenlace entre ¨Lisa y Fabián¨; la originalidad del ¨Un barril lleno de whisky¨, me atraparon. El sorpresivo “final” de ¨Adiós Amalia, adiós¨, cierra este cuento sugeridor.
Digo lo mismo de ¨Bajo la luz de la luna¨, relato en el que pinceladas románticas se conjugan con poéticas elementos narrativas. Por momentos, ciertos fragmentos de este texto me recordaron pasajes de Amanecer en África, si bien en, ¨Bajo la luz de la luna¨ se impone los fantástico de manera fundamental y con sabia eficacia.
Por todo lo dicho y mucho, más que haría esta carta interminable, reitero mis felicitaciones y auguro que nuevos libros futuros sigan enriqueciendo, no solo tu currículum, sino las letras argentinas.


Te envío mi cariño con un fraternal abrazo.
Norma Pérez Martín


P/S.  Disculparás está costumbre mía (tan constante a través de mis años) de hacer uso de cartas manuscritas. Sabrás comprender está manía que me aleja de la máquina de escribir y, sobre todo, de la computadora. Escribo aquí al correr de la pluma, por eso sabrás disculpa repeticiones y desprolijidades. Vale?

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